El primer gato Balinés fue encontrado en los Estados Unidos de América en el 1940. Se especula que el origen de esta raza fue debido cruce de dos gatos siameses que portaban el gen del pelo largo, al parecer heredado de algún gato Angora. Otros especialistas afirman que este tipo de raza se originó por el cruce entre un Angora y un gato Siamés.
Sea cual sea su teoría, ambas están en lo cierto, pues el resultado concuerda con la complexión de la mascota y con sus colores muy similares al gato siamés, y con su pelo largo y sedoso como los gatos de Angora.
Principales rasgos
El gato Balinés posee el cuerpo bien largo y se encuentra dotado de muy buena musculatura. Asimismo, sus extremidades han de ser extremadamente delgadas y las traseras son más altas que las delanteras. Su pelaje es largo y muy fino como la seda. La cabeza del gato Balinés es larga, el hocico es estrecho, su cráneo plano y las orejas son anchas y terminan en punta. Los ojos del balinés son almendrados, azules y su cola es larga y fina, la cual le da un aspecto muy misterioso y distinguido.
En cuanto a color posee las mismas capas que el gato siamés: manchas oscuras en orejas, cola, manos, cara y pies, las cuales pueden ser marrones oscuras o marrones claras. Asimismo, pueden ser grises oscuras azuladas o grises rosadas con su manto claro color crema.
En Europa se admiten otras capas diferentes a las de Estados Unidos consideradas como raza javanés: manto de color crema con puntos anaranjados rojizos, marrones o azules mezclados con color crema. Por otro lado, pueden observarse gatos Balineses de manto blanco con puntos grisáceos rosados y con manchas de color crema.
Carácter
El balinés se distingue por ser una raza completamente leal a su dueño y por tanto, si toma demasiado cariño por uno de los integrantes de la familia, seguramente deje a un costado a los demás componentes de la familia. Es un gato que adora el aire libre y sabe expresarse y sociabilizarse muy bien. Además, es súper simpático e inteligente, pero a su vez es un poco celoso, egocéntrico y terco, por lo que constantemente se encuentra buscando atenciones. Los balineses son ágiles y muy buenos trepadores y escaladores.
Cuidados
El gato Balinés precisa cepillarse al menos una vez por semana, porque el largo del pelo puede conllevar enredos o nudos. Cuando empiece a mudar su pelo, hay que cepillarlo una vez al día con un cepillo metálico y luego con uno de cerdas naturales.
Crianza
Sexualmente estos gatos maduran antes que la gran mayoría de las razas que tienen el pelo semilargo. Las hembras generalmente suelen dar a luz camadas de cuatro crías, las cuales cuidan con mucho cariño. Son célebres por ser mamás divertidas, ya que se divierten con sus hijos y nunca se cansan. Por ello, los cachorros de gato Balinés se desarrollan de manera rápida y aprenden un gran repertorio de juegos.