Lo mejor es elegir aquel con el que sientas verdadera conexión. Quieres un gato como mascota; pero te toca decidir entre hembra o macho. No es cosa fácil, pero ciertos aspectos como las diferencias físicas y de comportamiento resaltan a la hora de elegir. Gato o gata, es una difícil elección.
· Diferencias destacables
Entre algunas diferencias que puedes conocer para tomar la decisión correcta destaca el hecho de que las gatas son más cariñosas que los gatos machos. Ten en cuenta que algunas hembras pueden llegar a ser muy celosas con su propietario, mucho más que un macho. La gata suele ser aún más posesiva con su amo y con su entorno, tienden a sentirse más amenazadas.
Gato o gata, es una difícil elección porque también debes considerar aspectos relacionados a tu modo de vida y de cómo pudiera adaptarse la nueva mascota. El gato macho suele alejarse de la casa a mayores distancias que la gata, son unos exploradores natos; pero además son más proclives a las peleas regresando heridos la mayoría de las veces. Aquí prevalecerá el vivir en un apartamento o en una casa con jardín y patio.
Las diferencias físicas son notorias. El gato macho adulto suele ser de mayor tamaño que la hembra, por lo general también algo más brusco en sus movimientos, fanfarrón en su comportamiento y quizás con tendencias más agresivas. Ahora bien, muchas actitudes de los gatos, sean hembras o machos, se pueden remediar castrándolos o esterilizándolos.
Este proceso los hace más caseros, no dejan de cazar, se ponen más hermosos y afables. La esterilización del gato macho o hembra le produce bienestar al animal y mayor tranquilidad a los dueños. Y aunque decidir entre gato o gata no deja de ser difícil, lo mejor es tomar aquel con el cual sientas verdadera conexión.
